El Sabor de un Legado

La finca Altamira está ubicada en las laderas del parque natural Tatamá en el municipio de Santuario, Colombia. Fue allí donde Rafael Cano Echeverri, a partir del año 1954 inicia los cultivos de café, que con las bondades del clima y la buena fertilidad de las tierras logra producir con excelencia un café sin igual. Su hijo y su nieto continuaron este legado y el día de hoy lo quieren compartir con usted.